"Existe la necesidad imperiosa de lograr acuerdos básicos para no repetir los mismos errores que se cometieron en los anteriores programas de reformas.
Esto exige lograr consensos, ceder algo para lograr algo superior, solo así
vamos a salir adelante".
Carlos Larrázábal, presidente de Fedecámaras, comenzó su exposición planteando la necesidad de un mercadeo inteligente y eficaz del programa de reformas económicas. Esto es clave para evitar
resistencias innecesarias por perjuicios y estigmatizaciones. Hay que explicar
bien lo que se debe hacer.
Al abordar el contenido de las medidas de ajuste, los políticos suelen
decir a los técnicos e incluso a los empresarios: “tú estás tocando unos temas
que no ganan votos”.
Por eso la Oposición no tiene una propuesta económica clara de cómo
salir de la crisis. No se trata solo de “quítate tú para ponerme yo”, sin hacer
una propuesta concreta de cómo se va a sacar al país de la escasez y la
inflación. Por eso en el elector se impone aquello de que “más vale malo
conocido que bueno por conocer”.
Dicho esto, recordó que la recesión comenzó en el segundo semestre de
2014 cuando todavía estaban altos los precios del petróleo (más de 90 $/b). De
$ 65 millardos de importaciones privadas en 2012 estas cayeron a $ 6.500
millardos en 2017. El PIB p/c cayó a niveles de 1955, cayó en 40%. PDVSA
extraía 25 mil b/trabajador y ahora extrae menos de 4 mil b/trabajador. ¿Qué
hacer con el exceso de nómina de Pdvsa y las empresas estatizadas?
Fedecámaras trabajo en una “Visión 2025” para visualizar un país
industrializado y próspero. Con el apoyo de expertos, identificó consensos
transversales en todos y cada uno de los sectores de Fedecámaras en temas
macroeconómicos y laborales.
Asimismo, identificó un entramado de decisiones, medidas, leyes,
decretos y otras regulaciones económicas que asfixian la iniciativa privada,
afectan la confianza y alejan la inversión, tales como:
-
Más
de 1500 empresas estatizadas
-
Rígida
y arbitraria política de controles, confiscaciones y expropiaciones que
recrudecen inseguridad jurídica
-
Restricciones
a la producción: múltiples cargas para fiscales
-
Poca
transparencia y corrupción en la administración de justicia.
La producción de Sidor pasó de 4.3 millones de toneladas a solo 300 mil,
cuestión que prácticamente paralizó a la industria metalmecánica y a la de construcción.
En el Zulia hay 200 empresas fabricantes de resinas y plásticos que
están paradas por falta de gas. Incluso Pequiven no recibe suficiente gas.
La producción de alimentos registra una contracción de 23 meses
consecutivos. El Estado tiene el monopolio en fabricación de agroquímicos,
tiene 10 de los 16 centrales azucareros, 42% de la capacidad productiva de
harina de maíz, 80% de la capacidad procesadora de café, 26% de la capacidad de
producción de aceites y grasas, 100% de las industrias básicas, 100% de las
cementeras, y hay una creciente y cada vez más severa escasez de todos esos
rubros.
Desde 1999 hasta 2016, este ambiente adverso se expresa en el desmantelamiento
del tejido industrial que cayó de 12 mil establecimientos a solo 4mil, mientras
que el empleo se redujo de 600 mil puestos de trabajo a 180 mil. Por si fuera
poco, se agrava la fuga del capital humano calificado hacia otros países y esto
será muy difícil de revertir y reponer.
El impacto social por la crisis en efectivo en zonas rurales es enorme.
No hay suficientes agencias bancarias, no están bancarizadas y gastan 5 mil
bolívares en pasaje para retirar 10 mil en efectivo. Es preferible el subsidio
directo a las familias que prolongar los subsidios indirectos a la gasolina que
estimulan el contrabando de extracción.
Mientras la población creció 34 % entre 199-2016 el PIB apenas creció
20%. Mientras el consumo de los hogares cae en Venezuela, en los demás países
del ALBA crece.
Venezuela perdió el beneficio de 5 mil códigos arancelarios que podían
entrar a EEUU con 0 arancel. Por negligencia gubernamental salió de sistema de
preferencias arancelarias y también se perdió este beneficio en Europa.
Recuperar esas preferencias puede llevar hasta cinco años de negociaciones muy
duras
Las propuestas de Fedecámaras están contenidas en varios documentos
entre los cuales se destacan Compromiso
con Venezuela y Compromiso en Democracia y Condiciones básicas para el
desarrollo y cumplimiento de los objetivos del milenio, en el cual se
tratan los siguientes temas:
1. Paz y estabilidad política
2. Gobernaza
3. Dialogo social
4. Respeto de los DDHH y de las normas internacionales del trabajo
5. Cultura empresarial
6. Política macroeconómica estable y buena gestión de la economía
7. Comercio e integración económicamente sustentable
8. Entorno jurídico y seguridad jurídica
9. Estado de derecho y garantía de los derechos de propiedad
10. Competencia leal
11. Acceso a los servicios financieros
12. Infraestructura material
13. TIC
14. Educación, formación y aprendizaje permanente
15. Justicia e inclusión social
16. Protección social adecuada
17. Gestión responsable del medio ambiente